DOS ESCUELAS. USTEDES ELIGEN.

Es común leer o escuchar acerca de cuál es el mejor estilo de vinos. Si se trata de los de corte, elaborados por más de una variedad, o si son sólo varietales los grandes vinos de hoy.
Lo cierto es que en primer lugar la decisión es personal y más allá de un estilo u otro, en ningún lugar dice que se deba elegir sólo por uno de estos estilos
Ahora bien, quizás lo que si sea interesante es comprender qué se busca con cada estilo y en qué momento es mejor descorchar uno u otro. Por lo tanto esta nueva selección de Alta Gama busca justamente que ustedes se deleiten con dos grandes vinos totalmente opuestos, concebidos para expresar dos caras muy deferentes de una misma moneda: la vitivinicultura argentina actual.
Por el lado de los vinos de corte nos encontramos con el Ciento Veinte Años 2007, elaborado por Bodegas Trapiche. Mezcla de Cabernet Sauvignon, Malbec, Merlot, Cabernet Franc y Petit Verdot que despliega una clara expresión europea donde la crianza en barricas define su perfil tradicional, al que una prolongada estiba en bodega aporta la sofisticación que sólo el tiempo logra en los grandes vinos. Es así que encontramos un vino distinguido de aromática compleja donde las frutas maduras se funden con los tonos ahumados y especiados de la crianza, definiendo una identidad clásica mientras que en paladar conserva su carácter de típico tinto argentino a pesar de que la guarda logró pulir su costado más brioso para otorgarle elegancia en su fluir. Como puede notarse, un vino que expresa claramente el trabajo que demandó su elaboración así como las grandes obras demandan de tiempo para ser disfrutadas.
Es por esto que este vino es una pieza ideal para descorchar en ocasiones especiales, con paltos complejos y de alto vuelo, que exigen de unas cuantas horas de elaboración o bien para entretenerse durante una larga sobremesa donde el paladar pide que se lo acaricie.
Mientras del otro lado se encuentra el Zemlia Evolución Malbec 2010 producido por un joven emprendimiento ligado a la nueva escuela enológica de vinos intensos y expresivos. Aquí el Malbec, tras 9 meses de crianza en barricas se presenta con un color intenso y profundo mientras nos permite deleitarnos con la contundencia de una aromática frutal y nítida que delata la juventud de la cosecha. Aquí claramente sus hacedores quieren regalarnos un momento de altos decibeles que en paladar se replica con sabores firmes que invaden pidiendo sí o sí la compañía de un plato categórico. Sin vueltas se trata de un vino para quienes gustan de los tintos de impacto con perfil moderno e internacional. Un vino actual de una escuela que se impone.
Dos grandes creaciones que podrá disfrutar cualquier bebedor que comprenda que hay un vino para todos del mismo modo que siempre existe un momento para cada vino.