La reinvención de los clásicos

Hasta hace unos años el universo del vino argentino se dividía, en materia de estilos, entre modernos y clásicos. Mientras que los primeros proponían básicamente un estilo frutal y potente los otros se valían más de la crianza en barrica y el añejamiento. En este sentido, incluso algunos varietales se destinaban a un estilo u otro y así los consumidores lograban saber de antemano qué vino elegir de acuerdo a la ocasión. 

Pero en el último tiempo, los vinos argentinos se han aggiornado hacía expresiones frescas, ligeras y elegantes que dan como resultado vinos amigables y sabrosos como los elegidos por los catadores de BONVIVIR para su Selección Exclusiva de Marzo.  

Absurdo Cabernet Franc 2019, con uvas de Luján de Cuyo y Valle de Uco, es un Franc moderno de expresión varietal lograda y profunda. Con apenas 6 meses de crianza en barricas , es violáceo brillante con reflejos rojizos y aromas de frutos negros frescos como ciruela, moras y cerezas sobre tonos herbales y especiados con fondo ahumado sutil. Aborda el paladar con frescura, cuerpo medio y sabor frutal. Los taninos son jugosos y logran sostener el vino en su final prolongado con regusto herbal.  

Elaborado por Karim Mussi junto a el equipo de catadores de BONVIVIR, el vino SINGULAR del mes combina 70% Malbec, 17% Tempranillo y 13% de Syrah, todos frutos provenientes de La Consulta, Valle de Uco. Así nació Los Poetas Singular Blend 2021cuyo 30% pasa por barricas durante 8 meses y se trata de un tinto rojo rubí con reflejos violáceos mientras propone un perfil complejo de aromas frutales con trazos balsámico y de especias. Se destacan las ciruelas, moras, cerezas, tomillo, pimienta negra, canela y un dejo de aceitunas negras. En boca es amable, jugoso y equilibrado con sabor balsámico, cuerpo medio y frescura lograda. Taninos firmes y regusto herbal.  

Por su parte, Cavas Don Nicasio Reserva Malbec 2019, elaborado para Bodega Iaccarini por Daniel Pomar, proviene de San Rafael y propone un estilo renovado para una región de vinos clásicos. Luego de 12 meses de crianza en roble es un vino rojo rubí con tonos granate y aromáticamente complejo. Un buen aporte de crianza resulta el contraste ideal para los tonos frutales de las bayas negras y las violetas. Buen ahumado y clavo de olor. En boca se destaca con buen cuerpo, taninos mullidos y centro de paladar sabroso. Taninos firmes y pulidos que aseguran un final prolongado y potencial de guarda.